Una colección de historias, anécdotas, reflexiones y chorradas varias sin más objetivo que entretener

domingo, 25 de noviembre de 2012

Subcontratados, esclavos del siglo XXI

Llevo en mi actual puesto de trabajo más de dos meses y medio, y he observado un par de cosas nuevas que me han dejado bastante sorprendido. En primer lugar el porcentaje de empleados subcontratados por consultoras. Se trata de algo tan desnivelado (pongamos un 10% de empleados directos frente a un 90% subcontratados) que resulta cómico, sobre todo porque se trata de una empresa que, pese a la crisis sigue teniendo múltiples beneficios, con lo que la idea de la subcontratación debería ir a la baja en vez de a la alta como está sucediendo. En mi anterior empresa el porcentaje estaba más equilibrado, aunque también es cierto que el trato al subcontratado por parte del empleado era bastante peor.

Este fenómeno de la subcontratación es relativamente nuevo en nuestro país (no llevará ni 15 años) pero está creciendo como la espuma, y además basado en ideas que a mi modo de ver son erróneas. Resulta que la empresa A decide que quiere contar con los servicios del trabajador 1, pero cree que pagar al trabajador 1 un sueldo X y todo lo que eso conlleva en derechos laborales (cotización a la Seguridad Social, convenios, remuneraciones por despido, etc.) es demasiado. Entonces aparece la empresa B que le ofrece a la empresa A los servicios del trabajador 1 por un valor de X+10, asumiendo todas las cosas que la empresa A no quería asumir y que cree que con la compensación (el +10) quedan solventadas a corto, medio y largo plazo y le salen a A más rentable. Por otro lado la empresa B termina pagándole al trabajador 1 un sueldo de X-10, con lo que obtiene un margen más que aceptable (un +20 al que habría que restar las cosas antes comentadas). Si se analiza fríamente esta situación podemos llegar rápidamente a la conclusión de que:

  1. El trabajador 1 palma pasta, además de que con los contratos leoninos que hay actualmente la seguridad de mantener su puesto de trabajo y recibir una compensación por perderlo es ínfima.
  2. La empresa A termina pagando más por el trabajador 1 de lo que pagaría si lo contratara directamente. Absurdo, ¿no?
  3. La única beneficiada de esta situación es la empresa B, que por llevar a cabo ciertos trámites y no aportar nada o casi nada a la "cadena de valor", se lleva un trozo del pastel bien majo.
Entonces pasamos a preguntarnos por qué se da esta situación si los dos primeros implicados pierden en este tipo de situaciones...Pues porque los que manejan la empresa B tienen que ver con los que manejan la empresa A. Sí amigos, así es. Familiares, amigos, ex-directivos, incluso directivos actuales de la empresa A tienen algo que ver con B, y esta es la sucia manera que tienen de enriquecerse aún más. Lo triste es que el trabajador 1 no suele saberlo o si lo sabe poco puede hacer para revertir la situación, con lo que esta mierda de la subcontratación no hace sino dispararse para convertirse en algo normal en todas las empresas, cuando deberíamos tender a lo contrario.

Enlazando con esto último está la segunda cosa curiosa que me he encontrado. Resulta que para esquivar esta situación de la subcontratación de algún modo, algún trabajador de la empresa A decide que en vez de que la empresa B se quede con el margen abusivo que comentamos, crea una empresa, Fulanito Consulting, que es la subcontrata a Fulanito, es decir, crea una empresa para subcontratarse y quedarse con el margen. No se trata de un caso aislado, ya que sólo a mi alrededor conozco 3 ó 4 tipos que lo hacen, pero, ¿es esta la solución? Yo creo que no. Básicamente porque si la solución es esa, poco a poco terminaremos todos siendo autónomos y la idea del trabajador asalariado con derechos adquiridos desde hace décadas se irá al carajo. Yo creo que lo hay que hacer es denunciar el hecho en voz alta, poner los puntos sobre las íes y concienciar a la gente de que este mercadeo humano, no es más que el esclavismo del siglo XXI.


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